Esta velada en honor a Felipe Carrillo Puerto, recordando su fallecimiento, se aprovechó para aplaudir la inspiración que la tierra del caudillo, Yucatán, ejerció en compositores como Gustavo Río Escalante y Halfdan Jebe. Gustavo Río Escalante creó obras para enaltecer la cultura maya y las tradiciones locales de su natal Mérida. Halfdan Jebe, noruego que vivió un tiempo en Yucatán y conoció a Felipe Carrillo Puerto, dejó una huella indeleble en la música yucateca con obras como la Sinfonía en la menor, una conmovedora elegía dedicada a su amigo Felipe Carrillo Puerto.
Con amor y música: Orquesta Sinfónica de Yucatán honra a Felipe Carrillo Puerto en el 52º Festival Cervantinohttps://t.co/TtQwN2c855 pic.twitter.com/pUYfW4sqYF
— huellas de México (@huellasMx_) October 27, 2024
El homenaje contó con la participación de José Areán como director artístico y Marie Ythier al violonchelo, presentando un repertorio que incluyó las siguientes piezas:
Gustavo Río Escalante (1880-1963)
Danza de los Aluxes
• Allegretto
Franz Joseph Haydn (1732-1809)
Concierto para Violonchelo núm. 1
• Moderato
• Adagio
• Allegro molto
Intermedio
Halfdan Jebe (1868-1937)
Sinfonía en la menor “Del destino al ideal”
• Epopeya: Introducción
• De día: Minueto
• De noche: Adagio
• Marcha
Gustavo Río Escalante, nacido en la Mérida decimonónica, creció rodeado de influencias artísticas que nutrieron su inclinación por la música. Su formación en el Conservatorio de México y en Europa le permitió absorber influencias de compositores como Debussy y Puccini. Al regresar a Mérida, fundó el conservatorio de la ciudad y dedicó sus esfuerzos a la enseñanza y creación de obras que honraron la cultura maya y las tradiciones locales. La Danza de los Aluxes, compuesta en 1943, transportó a los asistentes al mundo de estas criaturas míticas de la cultura maya, con una atmósfera sonora que evocó las profundidades de la selva yucateca.
Franz Joseph Haydn fue uno de los compositores más influyentes de la historia de la música. Su Concierto para violonchelo en do mayor, compuesto entre 1761 y 1765 para Joseph Franz Weigl, se perdió durante siglos hasta que fue redescubierto en 1961. La obra, que consta de tres movimientos, mostró la maestría de Haydn en la escritura solista y orquestal, con un primer movimiento Moderato animado, un Adagio majestuoso y solemne, y un final que permitió al solista demostrar su destreza técnica.
Halfdan Jebe, nacido en Noruega, mostró desde joven gran habilidad en el violín, lo que lo llevó a formarse en las principales academias musicales de Europa. Su espíritu aventurero lo llevó a Yucatán a inicios de la década de 1920, donde desarrolló una amistad con Felipe Carrillo Puerto. A pesar de enfrentar problemas políticos y ser encarcelado en 1923, Jebe dejó una huella significativa en la música yucateca. Su Sinfonía en la menor, subtitulada “Del destino al ideal”, fue un testimonio de su profunda conexión con Carrillo Puerto y reflejó el impacto de su trágica muerte.
José Areán, director mexicano reconocido, estudió en la Escuela Nacional de Música de la UNAM y en el Conservatorio de Viena. Ha dirigido una amplia gama de actividades musicales y culturales en prestigiosos recintos de todo el mundo. Su liderazgo en la dirección de esta velada fue crucial para el éxito del homenaje.
Marie Ythier, comprometida con el estreno de obras de compositores de su generación, ha grabado seis álbumes y ha colaborado con renombrados directores. Su interpretación en el homenaje destacó su habilidad técnica y sensibilidad artística.
La Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY), desde su debut en 2004, ha sido fiel a su misión de acercar la cultura musical a todos los públicos. Ha participado en destacados festivales internacionales y ha compartido escenario con importantes figuras de la música. En esta ocasión, su interpretación enriqueció el homenaje, haciendo de esta velada un evento memorable en honor a Felipe Carrillo Puerto y su legado.