Los Ángeles, 2 de marzo de 2025 – La 97ª edición de los Premios de la Academia quedará grabada en la memoria como la noche en que Anora, la cinta independiente dirigida por Sean Baker, se alzó como la gran vencedora del 2025, llevándose a casa un total de cinco estatuillas, incluido el codiciado premio a Mejor Película. En una ceremonia vibrante conducida por el carismático Conan O’Brien, este relato crudo y emocionante sobre una trabajadora sexual de Brooklyn no solo conquistó a la audiencia, sino que marcó un hito en la historia de los Oscars al convertirse en el filme más premiado de la velada.
El Dolby Theatre vibró cuando Anora se impuso en categorías clave. Sean Baker, el cerebro detrás de esta obra, se llevó los galardones a Mejor Director y Mejor Guion Original, consolidando su reputación como un auteur de culto que finalmente recibe el reconocimiento de la industria. Mikey Madison, en una actuación que ha sido descrita como “un torbellino de energía y vulnerabilidad”, se alzó con el premio a Mejor Actriz, mientras que el trofeo a Mejor Edición también fue para el equipo de Baker, redondeando una noche de dominio absoluto. “Esto es por las voces que rara vez se escuchan”, dijo Baker al aceptar el premio a Mejor Película, dedicándolo a la comunidad de trabajadoras sexuales que inspiró su historia.
La victoria de Anora no fue solo un triunfo artístico, sino un fenómeno que incendió las redes sociales. En X, los usuarios no tardaron en celebrar: “Anora arrasó como debía, Hollywood finalmente premió algo real”, escribió un fan, mientras otro señaló: “Sean Baker y Mikey Madison son la dupla del año, punto”. El hashtag #AnoraOscars se disparó en tendencias, con memes y reacciones que iban desde la euforia hasta análisis apasionados sobre cómo una cinta de bajo presupuesto logró vencer a gigantes como Emilia Pérez y The Brutalist.
O’Brien, en su debut como anfitrión, aprovechó el éxito de Anora para soltar algunos de sus dardos cómicos más afilados. “Sean Baker hizo una obra maestra con seis millones de dólares, mientras yo gasto eso en café cada semana”, bromeó, antes de lanzar un guiño a la controversia de Emilia Pérez: “Karla Sofía Gascón no está aquí tonight, pero su cuenta de X sigue enviándome mensajes”. La audiencia estalló en risas, y el momento se volvió viral al instante.
Aunque la noche tuvo otros ganadores destacados —Adrien Brody se llevó Mejor Actor por The Brutalist, y Zoe Saldaña brilló con Mejor Actriz de Reparto por Emilia Pérez—, ningún filme se acercó al impacto de Anora. Con un presupuesto modesto de 6 millones de dólares y una narrativa que mezcla comedia, drama y un toque de caos, la película se impuso en un año competitivo, superando a producciones de gran escala y demostrando el poder del cine independiente. Su victoria también la convierte en la cuarta película en la historia en ganar tanto la Palma de Oro en Cannes como el Oscar a Mejor Película, un logro que la coloca junto a clásicos como Parasite.
Para los medios impresos, Anora ofrece una historia irresistible: una Cenicienta moderna que no busca un final de cuento de hadas, sino una verdad descarnada. Desde la alfombra roja, donde Mikey Madison deslumbró con un diseño minimalista, hasta el emotivo discurso de Baker agradeciendo a su equipo y a su musa, la noche fue un testimonio del impacto de una visión auténtica. Mientras los titulares se multiplican y las redes sociales no dejan de hablar de ella, Anora no solo ganó los Oscars 2025: redefinió lo que significa triunfar en Hollywood.