Jorge Brito, presidente de River Plate, reveló en una entrevista con TyC Sports que la selección mexicana pagó 15 millones de dólares para disputar un partido amistoso contra el club argentino, pese a que en un inicio había dudas sobre su nivel competitivo.
Sin embargo, lo más sorprendente fue una cláusula incluida en el acuerdo: River Plate no podría anotar más de dos goles contra México. En caso de que el marcador llegara a 2-0, el equipo tendría que realizar cambios estratégicos, incorporando jugadores jóvenes al campo. Esta condición reflejaría la crisis deportiva que atraviesa el combinado mexicano en el escenario internacional.
Este acuerdo millonario se da en un contexto donde River Plate ha mostrado una sólida administración financiera bajo el liderazgo de Brito, logrando reportar un superávit récord en los últimos meses. Para el club argentino, el beneficio económico de este tipo de encuentros parece ser una estrategia clave, más allá del desafío deportivo.