Morelia, Michoacán. Una clienta de Volvo Morelia denunció públicamente que la concesionaria quemó el motor de su vehículo por un error en el servicio de mantenimiento y, a pesar de que un técnico especializado recomendó el reemplazo del motor, la empresa se ha negado a asumir la responsabilidad.
Una falla en el servicio que desencadenó meses de lucha
Verónica, la afectada, relató que el problema inició el 22 de abril de 2024, cuando llevó su automóvil a un servicio rutinario en la agencia Volvo Morelia. Al recogerlo y conducirlo por unas horas, el testigo de temperatura del motor se encendió repentinamente. Posteriormente, descubrió que la agencia había olvidado colocar la tapa del tanque de anticongelante, lo que ocasionó una fuga de aceite y un sobrecalentamiento del motor.
Desde ese momento, la propietaria del vehículo llevó su auto en grúa a la concesionaria en múltiples ocasiones. Sin embargo, tras cuatro revisiones —el 23 y 30 de abril, además del 6 y 14 de mayo—, la agencia insistió en que no había daños graves y que solo requería un cambio de empaque.
Fue hasta el 28 de mayo cuando un técnico especializado de Volvo México realizó una inspección presencial y determinó que el motor debía ser reemplazado completamente. Sin embargo, el concesionario de Morelia ignoró la recomendación, argumentando que no era necesario y negándose a seguir las directrices de la planta en México.
Conciliaciones con Profeco y demoras en la reparación
Ante la negativa de la concesionaria, la propietaria del vehículo inició un proceso legal ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Hasta la fecha, se han realizado tres conciliaciones sin éxito, y una cuarta está programada para febrero.
Tras meses de presión, la agencia aceptó realizar una reparación mayor al motor en su matriz en Guadalajara. Verónica solicitó condiciones específicas para garantizar que las refacciones fueran originales y que el auto fuera trasladado en grúa, pero nuevamente sus peticiones no fueron respetadas.
La reparación en Guadalajara tardó del 4 de octubre al 21 de diciembre, periodo en el que el auto estuvo inactivo. Además, aunque la afectada exigió que el vehículo fuera devuelto en grúa o con una notificación previa, la concesionaria lo regresó rodando, ignorando sus instrucciones.
Nuevos fallos y costos adicionales
El 29 de diciembre, el vehículo volvió a presentar fallas. La propietaria lo llevó nuevamente a la agencia, donde le indicaron que el problema era la batería y que sería reemplazada. Sin embargo, días después, el concesionario le informó que el turbo también estaba dañado, atribuyéndolo al kilometraje del auto.
El costo de la reparación del turbo asciende a 52 mil pesos, lo que eleva el daño total a más de 300 mil pesos. Verónica insiste en que el problema fue causado por la negligencia de la concesionaria, ya que su auto siempre recibió mantenimiento en la misma agencia y nunca se le informó sobre fallas previas.
Falta de ética y afectaciones económicas
La denunciante también reveló que, durante el proceso, la agencia intentó trasladar la responsabilidad del error a un técnico, afirmando que los costos de la reparación estaban siendo descontados de su salario. Además, le preguntaron si deseaba que el empleado fuera despedido, a lo que ella se negó, argumentando que la empresa debe asumir sus errores sin afectar a los trabajadores.
Otro punto que resalta es la falta de un manejo documental adecuado, ya que la entrega y recepción del vehículo se realizaron sin un protocolo formal, sin fotografías ni comprobantes detallados. Además, mencionó que toda la plantilla del taller mecánico fue sustituida recientemente, lo que ha complicado la atención de su caso.
Durante los meses en que su auto estuvo inactivo, la afectada ha incurrido en gastos adicionales por renta de automóviles, taxis y fletes para su negocio, así como en trámites legales.
Exige solución y llama a otros afectados a denunciar
Verónica exige que la concesionaria de Volvo Morelia acate la recomendación de Volvo México y reemplace el motor y el turbo de su vehículo sin costo para ella. Además, hace un llamado a otras personas que hayan enfrentado problemas similares a no quedarse calladas y a presentar sus quejas ante la empresa y las autoridades correspondientes.
Para quienes deseen reportar casos similares, proporcionó el correo público de atención a clientes de Volvo: volvo1.mailac.costhelp.com.
Hasta el momento, Volvo Morelia no ha emitido una postura oficial sobre la denuncia.