En Puebla, la polémica envuelve a Marilyn Cote, quien se presenta como psiquiatra, pero enfrenta graves acusaciones por ejercer sin la preparación ni las credenciales necesarias. Según registros oficiales de la Dirección General de Profesiones (DGP), Cote no es médica ni psiquiatra. En realidad, cuenta con una licenciatura en Derecho, una maestría en Criminalística y un doctorado en Psicología, estudios que no la habilitan para recetar medicamentos ni ofrecer tratamientos psiquiátricos.
Reseñas negativas y respuestas agresivas
Las críticas hacia sus servicios no solo provienen de pacientes insatisfechos, sino también de especialistas que han señalado irregularidades en su práctica. En Google, varias reseñas han revelado capturas de sus títulos académicos, evidenciando la falta de respaldo médico. En respuesta, Cote ha utilizado un lenguaje agresivo, descalificando a quienes cuestionan su legitimidad.
En uno de sus mensajes publicados, asegura ser copropietaria del 50% de un consorcio médico llamado Fifty Doctors, al que describe como el primer hospital cinco estrellas en México. Sin embargo, usuarios señalan que dicho modelo de negocio se basa en la venta de acciones a “doctores”, lo que ha generado dudas sobre su transparencia.
Uso indebido del nombre de un psiquiatra certificado
Una de las denuncias más preocupantes señala que Cote utiliza el nombre del reconocido médico psiquiatra Rodrigo Orcajo Castelán en recetas médicas que emite a sus pacientes, sin contar con la autorización del especialista. Orcajo Castelán ha rechazado cualquier vínculo con Cote y, de acuerdo con fuentes cercanas, ya ha presentado demandas legales por el uso indebido de su nombre y el daño a su prestigio.
Consultas caras y prácticas fraudulentas
A pesar de las denuncias, Cote cobra $1,400 por consulta, un monto que sus críticos califican de excesivo para servicios sin validez profesional. Esto ha encendido las alarmas en la comunidad médica, quienes alertan sobre el riesgo que implica recibir atención psiquiátrica de personas sin formación médica adecuada.
Llamado a las autoridades
Este caso no solo pone en entredicho a Marilyn Cote, sino que evidencia la falta de regulación efectiva en el ejercicio de la medicina en México. Las redes sociales han sido clave para visibilizar el problema, con usuarios exigiendo la intervención de las autoridades competentes, como la Cofepris, para evitar que casos como este sigan ocurriendo.
Mientras tanto, expertos recuerdan que acudir con profesionales certificados es vital para proteger la salud mental y evitar complicaciones. Este episodio subraya la urgencia de reforzar la supervisión en el sector médico y garantizar la seguridad de los pacientes.