El conflicto en Oriente
Escala a nuevas y graves intensidades, luego de que esta madrugada se escucharan al menos cinco potentes explosiones en Teherán y la localidad de Karaj, reportadas por la televisión estatal iraní. Las tensiones entre Israel e Irán han escalado drásticamente, generando temores de un conflicto regional de mayor magnitud.
Mientras tanto, en la Franja de Gaza, el Ministerio de Sanidad palestino ha descrito la situación en el hospital Kamal Adwan como “catastrófica”, tras el asalto israelí que retuvo a más de 150 personas, entre pacientes y médicos. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha informado que se ha perdido contacto con el centro médico, lo que agrava la crisis humanitaria en la región.
En Jan Yunis, un bombardeo israelí causó la muerte de 38 personas, entre ellas 14 niños, intensificando la emergencia en el sur del enclave palestino. En paralelo, en el sur del Líbano, tres periodistas de medios afiliados a Hezbolá, Al Mayadeen y Al Manar, fueron asesinados en un ataque israelí mientras se alojaban en una pensión en Hasbaya, incidente que el gobierno libanés ha calificado como un “crimen de guerra”. Las hostilidades entre Israel y Líbano han dejado más de 2.600 muertos en el último año.
Este creciente enfrentamiento regional presenta un sombrío panorama, con civiles atrapados en medio de ataques y una situación humanitaria en deterioro, mientras la comunidad internacional observa con preocupación el desenlace de esta crisis.