En un acto de protesta y denuncia, alumnas del Tecnológico de Monterrey en Puebla se han manifestado públicamente para exponer un caso de acoso sexual y la posterior injusticia laboral sufrida por la profesora Merisa, despedida tras intentar proteger a las estudiantes.
|| Alumnas del Tecnológico de Monterrey han colocado lonas y pancartas en las afueras de la universidad para expresar su rechazo ante presuntas agresiones por parte de docentes. @FotoSintesisVH pic.twitter.com/0nIbQMzY0Z
— Síntesis Puebla (@sintesisweb) September 25, 2024
La comunidad estudiantil del Tecnológico de Monterrey, campus Puebla, ha levantado su voz en contra de lo que describen como una cultura de impunidad y violencia de género dentro de la institución. La protesta, que se llevó a cabo el 25 de septiembre de 2024, no solo denuncia casos de acoso sexual por parte de docentes, sino también el despido injustificado de la docente Merisa, quien fue crucial en la organización de estas denuncias.
La situación escaló cuando la profesora Merisa, conocida por su lucha contra el acoso dentro de la universidad, fue obligada a renunciar bajo coacción. Según su testimonio, después de recolectar testimonios y organizarse con estudiantes para denunciar estos actos, fue retenida en un cuarto por más de una hora, negándosele atención médica adecuada y presionada para firmar su renuncia. Esta acción, según Merisa, fue una represalia directa por su activismo contra el acoso sexual en el campus.
#DolorYSangre En el día contra la no violencia, hay manifestación frente al Tecnológico de Monterrey (@TecCampusPUE).
La maestra Merisa denuncia que en lugar de apoyarla, la despidieron por denunciar acoso sexual contra ella y las alumnas. Entre otros, señala al profesor… pic.twitter.com/x1sWLavxs3— MTP Noticias Puebla (@MTPNoticias) September 25, 2024
Entre los acusados se encuentra el profesor Álvaro, quien ha sido señalado por múltiples alumnas de acoso sexual. Además, el director del departamento, Omar N., también ha sido denunciado por comportamientos similares, con evidencia de acoso cibernético contra estudiantes. La manifestación no solo busca la justicia para las víctimas sino también la implementación de protocolos estrictos para prevenir futuros abusos.
La protesta ha sido respaldada por docentes, padres de familia y otros estudiantes, quienes se han unido en la demanda de una investigación exhaustiva y la desvinculación de los docentes implicados. Las consignas de «El Tec no me cuida, me cuidan mis amigas» resuenan como un clamor por un cambio en la cultura institucional, donde la seguridad y el bienestar de las mujeres sean prioritarios.
Demanda de Cambio: Las alumnas y sus aliados exigen no solo la justicia para las víctimas, sino también la creación de un comité estudiantil para monitorear y abordar casos de acoso, la implementación de exámenes psicosociales para el personal docente, y una política de cero tolerancia al acoso y la violencia de género.
Este caso pone en entredicho la responsabilidad de las instituciones educativas en la protección de sus miembros. La comunidad del Tec de Monterrey en Puebla espera que estas denuncias no caigan en saco roto, instando a una revisión crítica y acciones efectivas para erradicar la violencia de género en sus instalaciones.
NoLa historia de las alumnas del Tec de Monterrey en Puebla es un recordatorio de que la lucha contra el acoso sexual y la violencia de género sigue vigente. Este caso no solo afecta a una institución sino que refleja una problemática más amplia en la sociedad. Manténganse informados en nuestro sitio web para más desarrollos sobre este y otros temas relevantes.